VIII - ¡Aquellos molinos!

 
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En aquel grato molino
quedó prendado mi amor
de aquella molinerita
que... ¡con otro se casó!

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Si así acaricias al gato
porque te ahuyenta las ratas,
si tú quieres, molinera,
¡te ahuyento hasta los fantasmas!

  107
 

Molinera que me mueles
con tanto primor el trigo,
así el seso me trituras
tras habérmelo sorbido.

  108
 

Pa' no volver sin harina
vigilo a la molinera,
y hoy de tanto vigilarla
¡he vuelto hasta sin talega!

  109
 

Una molinera sola,
a pesar de su escopeta,
día y noche puede verse
a muchos sustos expuesta.

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No todas las molineras
necesitan quien las guarde:
pruebe un loco en mi molino
¡y vea qué tal le sale!

  111
 

Si me robas, molinera,
no me robas sólo harina,
me robas la paz y el sueño
y hasta me robas la vida.

  112
 

Ya cerró el viejo molino
al que iba con mi madre,
ya dejamos de ir al horno
¡y de comer pan fiable!

  113
 

Se cerraron los molinos,
se enfangaron las aceñas,
ya no corteja un mozuelo
a una linda molinera.

  114
 

Muerto el viejo molinero
la rueda se ha detenido,
la que nunca se detiene
es la rueda del destino.