Burro, pero menos

 
 

  Soy curto de talla
onque prou estrecho,
y la piel ixuta
m'encerra unos güesos
que no la foradan
per no cayé al suelo.
Soy tan poca cosa
que ni nombre tiengo.
  ¡Qué digo ni nombre,
si ni a burro llego!
  ..."Un burrichón tiene
y un trocé de güerto
y una casichona
cerca'l ceminterio",
d'Anselmo Costeta
se dice en el pueblo
(contán intereses,
que no entendimientos)
  Res de Retillante;
res de Carcelero.
Ni sisquiera Llaso.
Ni sisquiera Cheso.
  ¡Burrichón sin nombre,
curto, fllaco y viejo
de casa sin cubo,
pozal ni granero!

  Pero quiero ditos,
"solemnes bipédos"
(que uno també gasta
terminachos d'estos
sobre to si vienen
ben pa seguí'l verso),
cuatro verdás cllaras
y hasta de prou peso
antes de qu'un buitre
como yo de viejo
per bel barranquizo
me rada los güesos.

  "Y ¿qué de sustancia
dirá un burro viejo?..."
"¿Qué que me convienga?..."
"¿Qué d'algún provecho?..."
se dirán no pocos
"llistos" más u menos
d'ixes que consiguen
más duros que seso.

  Pos miraz que un burro,
burro más u menos,
puede dí más cosas,
sobre to si é viejo,
que muchos alcaldes
y bel romancero.
  Y en cuanto a sustancia
la sabrez ben lluego
perque, con permiso,
deseguida empezo.

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  Burrichón sin nombre,
curto, fllaco y viejo
de casa sin cubo,
pozal ni granero
ya é sé poca cosa...
¿Se puede sé menos?...
  Pero yo me digo:
¿Pa yo qué más quiero
que un amo cristiano
como'l que ya tiengo?
  Pobre per afuera,
rico per adentro,
con yo y con el tocho
va marchán Anselmo,
que may llega tarde
cuan va a ningún puesto.
  Va marchán sin prisa,
sin rudio, sin "cuento",
al revés de tantos
que ayer sin dos perros
llucen hoy los duros
con brenca respeto
ricos per afuera,
pobres per adentro.

  Mos entendén prou,
mos querén lo nuestro,
él me manda ben
y yo l'obedezco.
Ni'l uno ni'l otro
sacán may el genio
(él perque no quiere,
yo perque ni puedo)
y no sen mi pare,
se diría selo.
  M'hablla muchas veces
y me dice ejempllos
de burros medianos
que sin miramientos
revolcan la carga,
calcian a voleo,
braman per la noche
u tiran al mueso.
  Pero ¿qué amo tienen?...
¿Lo tienen muy tierno?...
me le miro yo
y él está d'acuerdo.

  ¡Qué majo sería
que a un amo tremendo
d'ixes que per cosa
dixan fllojo al trueno,
qu'arrean más lleña
que no'n crema'l fuego,
que dan poca palla
y brenca centeno
le salise'l burro
igual qu'un cordero!
  ¿Un burro a sé guito
no tiene, así, drecho?...

  Veis, onque podese
(perque ya no puedo
alzá las zoquetas
ni un palmo del suelo)
yo sí que a sé guito
no tendría drecho.
Perque tiengo un amo
que veyenme viejo
si no me fa sopas
é perque no'n quiero.
Me carga lo justo,
me tapa en invierno,
no me da un tochazo
ni per un conejo,
y si me paixenta
é perqu'en el güerto
alfalz no ñ'hay guaire
y ordio encara menos.
  ¡Yo digo que un burro,
en tocante a genio,
más pronto u más tarde
repllega el del dueño!

  Ya ñ'hay també algunos,
como'l burro'l Tieso,
malmetíus del to
u con mal remedio.
Pero ixes hermanos
son siempre los menos:
son los que la reglla
confirman de plleno.
  Va compralo en viernes
¡pobre Pepe'l Tieso!
y al queré montase
pa puyá un repecho...
per poco le costa
la orella d'un mueso.
  Y a peu desd'entonces
siguen burro y dueño,
más u menos chuntos,
menos u más tiesos.

  "Po...os que va apretame
u...un gitano tuerto
qu...e me lo dixaba
pe...er ni mitá precio
y... yo con las prisas
va...a cayé en el cepo",
espllica'l misache
qu'é prou tartameco.
  Y é que casi un año
con gitano ¡y tuerto!
per fuerza malmete
al burro más güeno.

  A yo me da pena,
y per ixo penso
qu'a los vente años
qu'estoy con Anselmo
no les falta guaire
si no son un premio.
  ¡Qué güena é la yerba
al lau d'este Anselmo
tan cabal, tan cllaro,
tan sufríu, tan güeno,
tan sesudo a veces
y otras tan risueño!
  Al cayé del día
¡cómo m'entretiengo
sentinle mil cosas
que son l'evangelio!
De las chens, del mundo,
d'estes y otros tiempos
y de los que vienen
qu'están no muy llejos
pa sabé si'l mundo
tira enta'l infierno
u si, dan la güelta,
milló busca'l cielo.
  ¡Mucho he sacáu yo
de tan güen mayestro!

  Y onque seiga raro,
contra los gubiernos
may tiene una queixa
"perque —dice Anselmo—
si son tan medianos
é per merecelos.
  "¿Qué sen los demás
millós qu'el gubierno?...
  "¿Rezán cada noche
per vivos y muertos,
per los que mos furtan,
per los embusteros,
per los que mos posan
a la mullé un cepo?...
¿Per qu'ella no'y caiga?...
¿Per que llueva a tiempo?...
  "En sé menos malos
¿posán prou empeño?...
¿U más en sé ricos
y más malmetemos?...
  "¿Ya tenín la honra
de sé ben sinceros
si habllán d'un vecino
poco amigo nuestro?...
  "En cumpllí los tratos
¿sen siempre prou serios?...
  "¿Dan lo que mos sobra
a qui tiene menos?...
  "¿Dan a Dios las gracias
cuan el año é güeno
y cuan no lo é guaire
per no selo menos?...
  "¡Pos de toz nusatros
salen los gubiernos!"

  També l'otra tarde
me diba certero
baixán de la sierra
de fé unos romeros:
  "¡Qué cuentas tan malas
muchos ricos nuevos
(y hasta si m'apuras
tantos de los viejos)
del mundo se sacan
y qué mal provecho!
  "Como si la vida
fuese sólo esto:
!Nomás espientamos!
!Nomás removemos!
!Nomás mil ganancias
buscá sin susiego!
  "Pa bel poco "estamos"
¿no hen de tení tiempo?...
Pa pensá en la vida,
pensanye con tiento,
que la vida é siempre
per fuera y per dentro
una cosa recia, un asunto serio,
si ríes, si plloras,
si tiens fame u miedo,
si pierdes, si ganas,
si'stás malo u güeno".

  Qu'Anselmo no é pobre
(al menos per dentro)
prou vienen a dilo
parecés com'estos
que son brenca curtos,
que son brenca'strechos.
  Más de cuatro veces
cuan m'allisa'l pelo,
se me monta un poco
u me da pan seco
é pa que me pense
que no'stoy tan viejo.
Y esta pobre coda
yo'ntonces meneo
y él así se pensa
que yo me lo penso.
  Algunos domingos
¡me dice hasta versos!
  Pa yo que pa cura
no hese teníu precio.
No d'ixes tranquilos
de misas y entierros
que fuman com'otri
y pasan los rezos
en cuanto fa frío
en el banco'l fuego,
sino d'aquels fllacos
que van misioneros
a pasalas negras
per tierras de negros.

  Y atacán l'asunto,
qu'amás viene a cuento,
escueza a qui'scueza
diré sin rodeos
qu'en tierras de bllancos
to y con los progresos
(u quizás per ixo)
ñ'hay cada "elemento"
que recllama, él sólo,
vente misioneros.
  Y diría encara
que ñ'habría riesgo
de, los ventiuno,
í a pará al infierno.
Qu'así ñ'hay no pocos
cargáus de vereno
per ixas ciudás
de trampas y estruendos,
de prisas y prisas,
per don van tan sueltos
los siete pecáus
y algunos de nuevos
que se tos asoman
ya hasta per los pueblos.

  "¡Pobres de nusatros!
—con razón Anselmo
no fa guaires días
me diba en el güerto—
¡Pobres de nusatros!
¡pobre mundo nuestro
si las chens que deben
da güenos ejempllos
(que ¡com'hay! qu'habría
de sé lo primero)
mos los dan tan malos
y en tantos terrenos!"

  Y uno que se sabe
lo malo y lo güeno
sigue per su cuenta
cuan se'n dixa Anselmo:
  ¡Pobres de vusatros
si trayen los tiempos
mucho más maquínas
que conocimiento!
  (Isen a la par
¡bendición del cielo!
No alcanzán a iye
¡pa qué milló infierno!)
  ¡Pobres de vusatros
si trayen los tiempos
mucho más "pildoras"
que crios cereños!
  (¿Puede sé ixo sano?
¿Puede sé ixo güeno?
¿No van allá en Roma
cayé per prou menos?)
  ¡Pobres de vusatros
si trayen los tiempos
mucho más "lloritos"
que machos en serio!
  (Machos a los campos,
machos con empeño;
machos a los llibros,
machos con tozuelo;
machos... a la ducha,
machos al barbero)

  ¿Sen burros los burros
u más los "bipedos"
per más que de cencia
estez tan replletos?...
  No digaz que no
sin tomatos tiempo,
perque si de cencia
estaz ben replletos
de decencia en cambio
ya lo'staz prou menos.
  Pero si lo diz,
reparaz en esto:

  Las malas maneras,
el poco respeto,
la mucha malicia,
los turbios enredos
en otras epócas
quedaban tan llejos
que sentibas dilos
sin llegá a creyelos.
  Pero ¡cómo corren
hoy con los inventos!
  Se meten y meten
y entran tan adentro
qu'a las chens más serias
les pillan mareos.
  Empezan los cines,
con robos tremendos,
con crimens d'espanto,
con vicios repuercos.
  Y siguen las "teles",
tan a ran de suelo;
llargas de ministros,
curtas de mayestros;
llenas de recllamos
ganchudos y tercos
que si no aborregan
parecen querelo.
  Dispués los diarios
(¿sin esquilla al cuello?)
trován a aquéls puros
y a toz tan contentos,
y dín mil torpezas
de cien forasteros
y de diez de casa
vente mil aciertos
que si no embabucan
parecen querelo.
  Y tantas revistas
pa fllacas de sesos,
con tantos retratos
y tantos jaleos,
con tantas simplladas
y tantos enredos
de tantas duquesas
más rancias u menos
que si no trastornan
parecen querelo.

  Y los "enchufismos",
y los "piloteos",
y las propagandas,
y los estraperlos.
  De to'n fez güen faixo
pa viví del "cuento".

  La fllo a la farina
le sacaz primero;
de la que tos queda
masaz el pan lluego;
com'el pan é fllojo
quiere un compllemento
y sacaz, a gritos,
"super-alimentos"
que la flló primera
son ni más ni menos.
  Pos ¿pa qué tocala?...
¡Viva san enredo:
unos sin camisa,
otros con sombrero!

  "Pero esto mos pasa
—diba'l siño Clleto—
per tanto galbán
—y encara en aumento—
que con tres pllumadas
—u encara con menos—
les cay el jornal".
¡Y toz tan contentos!

  Y puya'l consumo,
puya'l abadejo,
puyan las camisas...
¡y hasta los entierros!
Y no puya'l aire
perque los gubiernos
no saben encara
¡pero tiempo al tiempo!
pasalo pe'l forno
de bel ministerio.

  Y uno se pregunta
a la vista d'esto:
  ¿Qué mundo cuadráu
no vendrá a moletos
cuan d'este redondo
tornez del entierro?
  Qué mundo feliz
sin llustre y sin fuego
no vendrá a chelatos,
u casi, alma y cuerpo?
  ¿Qué mundo en las zarpas
de cuatro embusteros
no vendrá a'ncuadratos
ni vivos ni muertos?

  No viviz sencillo;
fuyiz de los pueblos;
buscaz, sobre to,
dale gusto al cuerpo.
  Toz querez sé más
y treballá menos;
toz parecé ricos
tos llegue u no'l sueldo;
toz comé "a la carta";
toz sé ben modernos:
sayas ben curtetas,
güenos movimientos,
tufas ben greñudas,
motos y copeos
¡y a pagá (¡u a no!)
lletras a parello!
  ¡¡Y a viví la vida!!
que diz qu'é to esto.

  Pero me pregunto,
pero tos pllanteo:
  ¿No será a matala
si no para'l chuego?...
¿si hasta los no chovens
ye chugaz sin esmo?...
¿si tos da reparo
aprendé a sé viejos
y teniz per tonto
a qui sabe selo?...

  ¡Y qu'un pobre burro
qu'está medio ciego
tan cllaro lo veiga
y tan espllatero
y no ixes sabiazos
d'ixes parllamentos!...
  ¿U sí que lo veyen
y les puede'l "cuento"
y las medallazas
y los tratamientos
y ¡vienga'l diluvio
cuan to'sté ben seco!?....
  Si seguiz asinas,
si no cambiaz lluego
mal se tos espera
salú y millós tiempos.
  ¡Tos lo dice un burro
qu'está medio ciego!

• • • • • • • • • • • • • • • • •

  Pero no se pense,
dispués de to esto,
qu'estoy contra'l mundo
u contra'l progreso,
u contra los bllancos
u contra los negros.
  ¡No son los colós!...
¡Son los sentimientos!
  Sí, contra los malos,
no, contra los güenos.
  Del coló que seigan
y de cualquier puerto.
Veigan más a misa
u ye veigan menos.
Voten per los anchos
u per los estrechos
(güeno, en don se vote
y se sepa felo)
  ¡No son los discursos!
¡Son sólo los "hechos"
los que de los fllacos
fan aumenta'l peso!
¡Los que de los gordos
fan baixalo a cero!
  ¡No! ¡Ni contra'l mundo
ni contra'l progreso!

  ¡Viajaz a las playas
(tornaz no muy "frescos")!
¡Gastatos jolgorio
con chispa y salero!
¡Posatos ben fuertes
chugán a cien chuegos!
  Pero ¡no! a sé mozos
no chuguez los viejos.
  Pero ¡no! a sé malos
no chuguez los qüenos.
  Pero ¡no! a sé llocos
no chuguez los cuerdos,
que maldá y llocura
podrían sé'l premio.

  ¡En no sé pa mal,
sacaz mil inventos!
  ¡Armaz mil maquínas
que to lo den feito
(to, menos las rosas
y los padrenuestros,
que capaces soz
de sé tan tremendos)!
  ¡Volaz en codetes
per ixes lluceros!
  Pero rezaz antes.
  Pero cantaz lluego,
que cantaz prou poco
y rezaz prou menos.

  Una canción cllara
en día sereno,
el sol ya cansáu,
un grillo en su acierro...
¡dice tantas cosas
a qui no'stá muerto!...
  Cantaz ¡sí! cantaz
¡cantaz a voleo!
A la moza... al aire...
a la fuente... al pueblo...
a la suegra... al surco...
a la rosa... al fuego...
  Rezaz ¡sí! rezaz
¡como sepaz felo,
que Dios no é pas sordo,
que Dios no é pas ciego!
Y en veyeye Él
güena fe y empeño
lo tendrez de cara
en toz los momentos
pa datos aduya
u, si no, consuelo.
  Y amás si cumplliz
los diez mandamientos
tal vez lo demás
seiga lo de menos.

  Y negros y bllancos
y anchos y estrechos
querez, cuan tos toque
está en el fllorero,
que no ñ'heiga'nvidías,
que no ñ'heiga "cuentos"
que no ñ'heiga odios,
que no ñ'heiga duelos
(ni tanto granuja,
que'n sobran con menos)
  Que ñ'heiga justicia,
que ñ'heiga refreno,
que ñ'heiga palabra,
que ñ'heiga respeto.

  Miraz ben los ricos
qu'hez de sabé selo
(¡pe'l canso l'agulla
no'y pasa'l camello!)
selo con maneras,
selo sin pllumeros,
selo a lo persona
y no a lo fulero.
  Y miraz los pobres
(u, pa sé moderno,
los de bolsa débils)
qu'hez de tení pecho
pa viví esta vida
sin tacha y sin miedo
y esperá la otra
firmes y serenos.

• • • • • • • • • • • • • • • • •

  No sé si han síu cllaras
ni si de prou peso
las cuatro verdás
del burro'l Anselmo,
pero aquí tos quedan,
"solemnes bipédos",
que quereba un día
dítolas con tiempo
antes de qu'un buitre
como yo de viejo
per bel barranquizo
me rada los güesos
y el día ha síu éste
y éste ha síu el tiempo.